El fin de semana pasado disfruté como un niño pequeño en el II Trofeo Ciudad de Zaragoza. La organización fue impecable y poder conocer a tantos billaristas algo muy especial. Sabía a lo que iba, pues todos hablabais muy bien del torneo que organiza Sergio Lagunas, pero fue aún mejor de lo esperado. Para hacer balance de los tres días de billar sin freno que pasamos en el Drinks & Pool hoy destaco en este post los tres aspectos más positivos del campeonato y tres ideas para mejorar en la próxima edición. Al final no te pierdas el video-reportaje del torneo.
Positivo
Ambiente de billar excepcional
El club se quedó pequeño ante tantos billaristas. Competir en ese ambiente es lo que motiva al jugador. Hubo mucho compañerismo y no paramos de jugar en ningún momento.
Organización muy eficaz
Lo que más odiamos los billaristas son los retrasos y las esperas entre partidos. En Zaragoza no fue un problema gracias a la tecnología: usar tablets como marcadores y cuadrantes online actualizados en tiempo real fueron las claves.
Grandes premios
Uno de los atractivos del campeonato fueron sin duda los premios. Se repartieron 5.000 euros en total: 1.000 para el campeón, 600 para el subcampeón, 400 para los semifinalistas, 200 del 5 al 8 y 150 del 9 al 16. Buenas recompensas.
Negativo
Mesas de 8 pies
El campeonato sería mucho más atractivo si se jugara en mesa grande pero Zaragoza es tierra de 8 pies. En todo caso, mucho mejor ocho que siete. Aún así, me sorprendió el buen rendimiento de las SAM en estas dimensiones.
¿Mejor Bola 10?
Demasiado nivel para jugar a Bola 9 y en mesa pequeña. Para incrementar la dificultad del torneo y evitar tanta serie, sería conveniente competir a Bola 10 o incluso Bola 8.
El que pierde paga
No me parece bien que el perdedor de cada encuentro deba pagar la mesa. Es cierto que con este dinero se pueden ampliar los premios, pero repercute más sobre los jugadores con menos opciones de llegar lejos. Soy más partidario de aumentar la inscripción para mantener las mesas abiertas durante todo el torneo.