Dicen que la motivación es la gasolina del cerebro. Mientras tenemos el depósito lleno, no nos cuesta hacer las cosas. Pero cuando entramos en reserva, la más mínima tarea nos supera. El gran problema es que es una gasolina muy cara.
Esa es la razón por la cuál he publicado menos artículos los últimos meses y os he abandonado en julio. Lo siento, mi depósito de motivación estaba medio vacío y me sentía incapaz de seguir escribiendo billarconsejos y ejercicios. Pero aquí estoy, de nuevo con ganas de compartir buenos contenidos con mis queridos artistas del billar 🙂
Y hablando de motivación, hoy te daré algunos trucos para superar esos momentos de bajón que nos dejan sin fuerzas ni para jugar al billar (o escribir). ¿Preparado para un buen chute de motivación billarística? ¡Allá vamos!
Esto es un juego
A veces lo olvidamos, pero esto es un juego: un deporte, un hobbie, un placer, un entretenimiento. Si te sientes sin ganas de billar, piensa que es simplemente un juego y juega sólo para pasarlo bien.
Si no te apetece jugar, mira vídeos
Una buena forma de seguir conectado al billar cuando no te apetece ir al club es ver vídeos de partidos o jugadas. Tenemos la gran suerte de estar a un clic de los 147 históricos, de las partidas más míticas, de las entrevistas con los pros o de las virguerías de Florian Kholer. Aprovecha los mejores canales de billar en YouTube.
Tómate un descanso
Cuando el cuerpo te pide un descanso, hazle caso. Parar un tiempo es a veces la mejor manera de volver con las pilas bien cargadas. Yo me tomé este descanso entre 2010 y 2014. Después de 8 años de jugar sin parar, aparté por completo el billar de mi vida. Tenía otros frentes abiertos, otras prioridades, pero sabía que tarde o temprano volvería. Y sin darle demasiadas vueltas, una tarde de agosto de 2014 me reenganché.
Lectura relacionada: ¿Porqué juegas al billar?
Cambia de entrenamiento
La desmotivación llega la mayoría de veces porque nos cansamos de hacer siempre lo mismo. De la dichosa rutina. Para que eso no ocurra intenta hacer entrenamientos muy variados, jugar contra rivales diferentes o ir a otros clubes además del tuyo. Cuanto más dinámico seas, más fácil será mantener alto el depósito de motivación.
Si no hay campeonatos, hay drills
Un billarista competitivo se motiva muy fácilmente si tiene algún torneo a la vuelta de la esquina. Pero en verano, sin tener apenas campeonatos a la vista, es fácil perder las ganas de jugar. Es el mejor momento de entrenar las rutinas (drills). Aquí tienes unos cuantos ejercicios.
La desmotivación sólo se vence con motivación
¿Te faltan ganas? Ponle ganas. ¿Te falta fuerza? Ponle fuerza. ¿Demasiados pensamientos negativos? Piensa en positivo.
Sí, la motivación es una gasolina muy cara. Pero la gran ventaja es que eres tú quien marca el precio. Cuestión de actitud.
PD: Si te apetece leer más sobre el arte de estar motivado, te recomiendo que leas El Círculo de la Motivación, un muy buen libro del cardiólogo Valentí Fuster. Lo leí hace unos años y desde entonces soy más consciente de los diferentes ciclos emocionales. Releerlo estos días me ha servido para volver a llenar el depósito 🙂