En nuestra cita con el billar histórico de esta semana viajamos hasta Cardiff. La capital galesa albergó en 2001 el Campeonato del Mundo de Bola 9 y a la final llegaron dos jóvenes estrellas del pool europeo: Mika Immonen y Ralf Souquet. El alemán ya se había hecho con el título en 1998, para el finlandés era una gran oportunidad de ganar su primer gran torneo el mismo año que fue finalista en el US Open. El premio no estaba nada mal: 65.000 dólares para el winner (más del doble de lo que recogió Ko Pin Yi en 2015 por ganar en Qatar, 30.000). Gran partido a 17 ganadas entre dos rocas. La emotiva celebración tras la victoria no tiene desperdicio.